Te hace vos

El 2016 a punto de vencerse y mi cabeza un carnavalito de sensaciones.
Sensaciones locas, de remate, suculentas y tediosas. Sensaciones que me mueven a escribir así.
En soledad, como a veces necesita estar uno, un poco tranquilo. Con uno mismo. En silencio, escuchando y disfrutando el alma. Es ahí, también, en ese instante, donde empiezan a retumbar los miedos. Esos que te hacen replantearte todo lo que venís haciendo, si lo venís haciendo bien. Si lo que haces, lo haces con pasión, como dicen que se hacen las cosas que le gustan a uno.
 Creo, después de atravesar muchos de estos ratos, que el antídoto es siempre llegar a la calma y reconciliarse con esa soledad. Tratar de hacer un pacto entre la cabeza y el corazón, como para estar un poco mas tranquilos, y que esta inundación de pensamientos no desencadene peores situaciones. Por eso, hacerse amigo de ese miedo, acompañarlo, acariciarlo y entender que es solo el poder de la cabeza.
 Una vez escuche por ahí, que la gente sufre mas por lo que piensa que por lo que le sucede. Y al fin y al cabo, llego a la conclusión que la consciencia es hermosa cuando se despeja y vuela de la mano del corazón. Y eso, pasa cuando no se calla nada, cuando las cosas se hablan y no se devoran, cuando se abraza con fuerza, cuando uno quiere, cuando no hay caretas, cuando uno esta donde quiere estar y con quien quiere estar, sin culpas ni presiones.
El corazón no es quien siente pero es el que late fuerte y sana y vuelve a doler y se arma y se rompe. Que si me caigo o si me levanto. Pero quien mas que uno. Quien mas que yo va a tener la fuerza para levantarme.
Que es eso de si me ganan, me preparo para ganar o si me dolió me recupero para que le duela al otro mas que a mi. ¿Que?¿Por que?¿Para que? Algunos le llaman venganza, otros ambición. A mi me parece un masoquismo. Inconsciente, pero que al fin y al cabo nos destroza por dentro. Para que aplicar el tan famoso "ojo por ojo, diente por diente", si al fin y al cabo me quedo en las mismas condiciones que el que logro generar ese estado en mi.
Somos humanos, a veces cuesta arriba, a veces cuesta abajo. Pero todos terminamos de forma horizontal con los ojos cerrados al final del día. Y que mas da, si ser humilde y corazonudo es lo mas gratificante que hay. La sonrisa en otro, generada por uno es un premio de honor al alma. Tantas cosas que el dinero ni las cuadradas de plástico no consiguen y seguimos buscando la satisfacción ahí. Si el amor es del mundo y permanentemente tenemos acceso a el. Esta en cada uno la forma en la cual recurrimos a este. Pero es hermoso amar, por sobre todas las cosas, mientras vas caminando por este viaje.
Estamos de pasada, pero estoy segura, que para sacarle el jugo a todo este lío de realidades adversas, hay que abrir los brazos, mirar a los ojos, besar con pasión, luchar con ganas, agradecer mucho, asumir con racionalidad y tomarse un mate con alguien lindo de corazon. Querer es poder y si no lo crees, acostate un rato y pensa. Pensa y enamorate, amate, respetate, cuidate y reacciona. Revolve tu ser y aliate con todo lo que se te oponga. Por que podes mucho mas que eso. Y querete, con todo lo que te toque. Y a todo eso, querelo también. Por que todo eso, esa soledad y ese miedo, eso que te cuesta tragar, eso que te duele y no te deja avanzar, eso, sos vos. Y eso te sacude. Te hace sentir cosas hermosas y terribles a la vez. Te hace vos.
Y por ser vos, tenes todo lo que tenes. Y agradece por todo eso. Por que te aseguro que tantos quisieran andar tus chancletas y vos quejándote. Te garantizo que sos mas que unos centímetros cúbicos de miedo e irritación, que unos kilos arriba, que un objeto que cuesta mucho, que todo aquello que tengas en tu poder. Y todo lo que esta detrás de esos fantasmas, que te hacen revivir de toda la bosta, también, te hace vos.
Adios veinte dieciséis, y gracias por tantas piñas y tantos mimos, que hicieron mi yo. 

Por tu bien. Por vos.

Muchas veces nos pasa que, por una u otra situacion, perdemos el rumbo por un rato. Y es en ese instante donde quiero que te acuerdes siempre de esto..
O por lo menos de algo de esto, no?
*Para alguien, sos todo. Lo maximo, lo pleno, lo mejor.
*Tu sonrisa puede alegrar a gente que ni siquiera te imaginas.
*En muchas ocasiones, la única razon por la que alguien puede odiarte es porque realmente esa persona quiere parecerse a vos. Y en esos casos, demostrale que odiar es insaluble.
*La vida es demasiado corta como para levantarse cada mañana con tristeza o de mal humor y arruinar el resto del día. ¡Se feliz y agradecido!
*Ama a las personas que te tratan bien, y olvidate de aquellas que no lo hacen, y tene presente que todo pasa por algo.
*Cuando crees que la vida te dio la espalda, cambia tu perspectiva. Mirala desde otro ángulo. Vas a ver que es mas linda.
*Recuerda siempre que si la vida te da otra oportunidad, ¡significa que vas a poder demostrar todo tu potencial!
*Si tenes una oportunidad ¡no la desperdicies!
*Nadie dijo que fuese facil, solo dijeron que el esfuerzo vale la pena.

Ultima vez

Conoces las zapatillas que llevas puestas, no es la primera vez que te las pones, ni la segunda. Y por eso al llegar a casa te las quitaras con la ayuda del otro pie, sin ni siquiera preocuparte si se están ensuciando. Pero si fuera la primera vez que te las pones, te las quitarías delicadamente y las acomodarias una al lado de la otra. Sólo si fuera la primera vez. Ahora no. Ahora llegas a casa después de un día agotador y tiras el bolso y el celular en la cama, pero si fuera nuevo lo dejarías en la mesa y hasta tendrías miedo de que se rayara.
Y lo mismo pasa con las personas, con tu pareja, con tu familia, tus amigos. Sabemos que están allí, y dejamos de mirarlos como la primera vez. Han pasado a la historia las miradas del primer encuentro, y tener que pensar la frase perfecta antes de decirla. Hemos dejado de conquistar día a día. Porque ya no es nuevo. Porque se consume.
Consumimos objetos, ropa, viajes, espectáculos, experiencias y hasta consumimos personas. Y con las personas el amor. Y el amor no debe consumirse. Porque si fuera la primera vez que llamaras a alguien, no te quedarías callado al otro lado del teléfono, le preguntarías hasta el más mínimo detalle: hasta la ropa que lleva puesta. Si fuera la primera vez que vieras a esa persona, te hubieras fijado en el color de sus uñas, en el color de las medias y el perfume que llevaba puesto se te hubiera quedado grabado para recordarlo cuando te despidiera. Si fuera la primera vez que viajas, te acordarías del número de asiento donde estás sentado, de la música que sonaba cuando despegabas y hasta del nombre de la azafata. Si fuera la primera vez que duermes junto a alguien, habrías cambiado las sábanas, perfumado la habitación y no oa habrias dejado de abrazar en toda la noche.
Y lo mismo pasa con las últimas veces. Lo que pasa es que no sabemos cuándo será la última vez que vayamos a ver a alguien, o que vayamos a usar algo. Y continuamos actuando como si no pasara nada. Pero si fuera la última vez, ¿cuántas cosas cambiarías? Si fuera la última vez que vieras a tu hermano seguramente le darías tantos consejos como abrazos pudieras. Si fuera la última vez que pudieras escribir, dejarías una carta despidiéndote y agradeciendo a quien lo mereciera. Si fuera la última vez que vas a dormir, no dormirías. ¿Dónde irías si fuera la última vez que viajaras? ¿Lo has pensado? Pues ese destino que tienes en mente, es el que tienes que hacer, esos consejos y abrazos que le darías a tus seres daselos ya. Y no esperes al último día para agradecerle algo a alguien. Los últimos días nunca están señalados en el calendario.

No todo es lo que parece

No siempre uno obtiene lo que espera. Y ni hablemos de lo que uno quiere no?.
Hoy por hoy, hablamos de "casa" como un refugio. Como él lugar de descanzo y paz que tenemos al final del día. Él sitio donde podemos ser tal cual somos, andar como caímos al mundo sin ningún pretexto. Pero es ahí mismo, donde de un momento a otro podemos cambiar de sentimiento en un solo parpadeo. Del disfrute extremo a la desesperación total. Es una especie de abrazo. De lujuria rústica.
Pero como bien nombre arriba, no todo es lo que parece.
 No toda CASA es una "casa". Quizás es un pedacito de tierra. Un árbol añejo. Un banco en la ciudad. Un ratito de musica. Una película y un buen trago de café. Todos tenemos alguna casa. Un lugar en él cual somos felices ( por lo menos por un rato).
 Pero a veces, hay alguien, a quien no llamamos "casa". Pero da los mejores apretones, que llegan a lograr mimos que nadie puede lograr. Que juntan un bolsón de emociones que nos hacen sentir felices. Como, a veces, en casa.